Fabián Pitoia
Al comité de redacción de la Revista Argentina de Endocrinología y Metabolismo.
Con gran interés he leído el trabajo Estimulación iterativa de TSH endógena mediante el uso de la hormona liberadora de tirotrofina en pacientes portadores de carcinoma diferenciado de tiroides, publicado por Degrossi y col. (Rev Argent Endocrinol Metab 44:67-77,2007).
Si bien en el estudio se comparan 2 grupos de pacientes diferentes (uno prospectivo que recibe el nuevo protocolo propuesto usando TRH y otro de manera retrospectiva que suspende la terapia hormonal de reemplazo), no se menciona el uso de metodología estadística para la comparación de estos dos grupos.
Por otro lado, ya en el año 1992, se demostró claramente que la TRH generaba elevación de los niveles de TSH, pero que esta hormona era estructuralmente diferente a la observada de manera basal en el mismo paciente, seguramente con diferencias biológicas notables (1). Ésto hace que la estimulación con TRH, si bien efectiva, como queda demostrado para la elevación de TSH, probablemente genere menor estimulación a nivel del tirocito.
En este estudio, tampoco se evalúa el tiempo en el cual, luego de la estimulación inicial, los niveles de TSH permanecen elevados en sangre en el conjunto de pacientes.
Para que este estudio pueda tener conclusiones válidas y aplicables, tiene que incluir a un grupo de pacientes que debe ser estudiado inicialmente con este protocolo (FASE 1) y luego al mismo paciente debe estudiárselo tras la suspensión de la terapia hormonal, permitiendo una elevación de los niveles endógenos por arriba de 30 mUI/ml (FASE 2). Entonces, la comparación de los resultados de los rastreos corporales totales asociados a los niveles estimulados de Tg con uno y otro método podrá validar estas conclusiones, tal como se hizo con el
uso de la TSH recombinante. (2)
Mientras tanto, este estudio demuestra que la TRH genera elevación de los niveles de TSH, que probablemente estimula en la mayoría de los pacientes la captación de radioyodo y la síntesis y liberación de Tg, pero de ninguna manera este estudio permite avalar el empleo de esta metodología en el seguimiento, y menos aún, en el tratamiento (ablación de remanentes) de pacientes con cáncer diferenciado de tiroides.
Conflicto de interés: Fabián Pitoia es médico consultor externo y forma parte del Speaker Bureau del laboratorio Genzyme Corporation.